iba yo paseando al perro bajo la lluvia y mi síndrome de diógenes me hace estar cual ave de rapiña vigilando los muebles que tira la gente la noche que los basureros recogen los trastos... es muy chungo, ya que hay poca cosa aprovechable, y la que hay, no dura ni dos segundos. Está lleno de homeless y chatarreros de barrio vigilando también. He visto una estantería con puertas que estaba bien para mi habitación-trastero y he vuelto a bajar con el bendito carro de ikea (qué10 euros más bien invertidos, dios!), pensando que ya no estaría... y estaba!!!
Necesitaba diversos factores: que no hubiera ninguno de los 3 chatarreros por metro cuadrado a esas horas con el que tener que competir, que no pesara mucho a pesar de medir más de metro ochenta para poder arrastrarla sola, que no hubiera mucha gente por la calle para no hacer el ridículo... total, que he llegado hasta mi presa, la he puesto en el carro... y se me cae un pomo. Un chico que pasaba por allí me lo ha recogido, y yo rezando para que no me desequilibrara y se me cayera el mueble encima. En mi camino a casa (qué 5 minutos más largos!) me he cruzado con un par o tres de personas, y una de ellas era una chica que por su tono de voz parecía gitana (no podía ver más allá de mis narices): "oooy qué bien chica, qué bonito, has hecho bien!!!!". ¿Qué decir cuando te dicen de corazón que has hecho bien en coger un mueble de la basura, a sus ojos bonito y bien conservao? Pues sólo he atinado a un gracias, eso sí, sin pararme, no fuera a perder el ritmo y me tuviera que rendir.
He conseguido subirlo a casa y ahora desde la cama noto un tirón por el hombro... pero y mis 80 euros que me he ahorrado por no comprarlo?
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