El viernes disfruté muchísimo del concierto de Marlango en el Palau de la Música, el recinto más bonito de BCN, a pesar del sueño y una contractura en el cuello que aún arrastro. Dio para dos horas y media disfrutando de Leonor, así que en las canciones que menos me inspiraban, me inspiraba yo en Leo, que tenía a escasos metros de mí.
A pesar que salió
disfrazada de chicle boomer de fresa, más delgada de lo que debería y con flequillo (para mi gusto los flequillos bajan el
sexapíl) el concierto me gustó más que otras veces, en las que
no me transmitía apenas nada. Os dejo
un vídeo en que sale el vestido del que os hablo y los entrevistan un poco. Antes disfrutamos de una telonera (
Maïa Vidal) que me sorprendió gratamente a pesar de no cantar un estilo que me apasione, pero la voz en directo me encantó.
Al lío, cuando Leonor se cambió de vestido y se puso uno de tirantes por encima de las rodillas, me pasé más de una hora mirándole las piernas y pensando qué haría yo con esa mujer (no soy de piedra), que aunque parezca lo contrario, no es de
mis favoritas para nada. En las fotos la sacan muy tigresa, pero en vivo es más del palo adorable.
[Butterflied hija, saca dinero de bajo las piedras y vete a verla, hazmelfavor!]. Y me surgieron clases de mujeres según lo que me despierten:
1. Las intocables
Son esas mujeres que son como diosas, no es imprescindible que estén buenas, pero imponen ese no se qué que impedirían cualquier contacto físico con ellas.
Ejemplo: Meryl Streep.
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Meryl como Miranda en el diablo se viste de Prada |
2. Las "me pones como una perra"
Son tan espectaculares que también te imponen como las anteriores, pero te ponen tan cachonda que dejarías que te poseyeran en una sesión de sexo salvaje.
Ejemplo: Angelina Jolie.
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Ay Dios |
3. Las tiernecitas
Están buenas pero no te dan ganas de tirártelas salvajemente. Simplemente las quieres tener entre tus brazos, compartir unas risas y jueguecitos y probablemente terminar haciendo el amor entre sábanas de seda mientras la brisa estival del atardecer se cuela entre las cortinas de un hotel de la costa italiana.
Ejemplo: Leonor Watling
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Quita bicho |
4. Las colegas
Aunque estén buenas, a pesar de no ser requisito indispensable, no te despiertan nada sexual y sólo te apetece ir de birras con ellas y de vez en cuando darles un abrazo o unas palmaditas en la espalda.
Ejemplo: Leisha Haley como Alice en The L Word (es que ahora no se me ocurre ninguna que me convenza)
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Qué mona |
5. Las feas
Ni te atraen físicamente, ni te las quieres tirar, ni te apetece coleguear con ellas. Te dejan más indiferente que la expresión de una muñeca de trapo.
Ejemplo: Sarah Jessica Parker
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Ni con lentejuelas, hija |
Y como mis gustos no son los vuestros,
¿Qué ejemplos pondrías tú en cada categoría?
¿Qué otra categoría añadirías?