Soy gilipollas

Hace mucho frío en la calle. Tengo que ir al médico y no me apetece nada.

Esta noche he soñado que estaba en Madrid, en un bar con conocidas del cole y mi ex. Era la actualidad, ella con sus pintas y obviamente no estábamos juntas. Estábamos pidiendo en la barra, que estaba en un altillo, cuando el camarero (un sudamericano de dos metros) se ha puesto a gritarnos que habláramos en español, que cómo me atrevía allí a hablar catalán. Le respondo que en ningún momento le he pedido nada en catalán, que estaba flipando (la conversación se ponía chulesca) y él me dice que se refería a cuando le he hablado a mi ex (quizá sí que lo había hecho, cosa rara también porque ella no es catalana). Faltaría más, que entre nosotras no pudiéramos hablar lo que nos diera en gana, que si hubiéramos hablado en chino hubiera montado tal bronca. Las cosas se ponían feas, y no sé cómo, aunque sus compañeros intentaban pararlos, de un empujoncito la ha tirado de espaldas al suelo desde el aire, pasándola por encima de una mesa. La he sacado como he podido de allí y nos hemos ido en busca de una comisaría. Íbamos con las del cole también, pero estábamos todas muy afectadas. Yo más, porque me estaba comportando como pareja cuando sabía que no, y ella un poco también. A medio camino se ha parado en un hostal de mala muerte a saber porqué, si para pedir pasta, tabaco o cualquier cosa. Supongo que es donde vivía. Yo me esperaba en una tienda bizarra llena de cosas ochenteras y ahí se me ha difuminado todo. Me he despertado y me he abrazado a mi perra.

Puta mierda el tema del catalán, castellano, barça y madrid. Que todo es más fácil que eso joder, es bien fácil vivir en armonía cada uno con lo suyo. Hay cosas más importantes en la vida.

Cuando ya me iba, trasteando por el ordenador me he topado con una carpeta con nuestros nombres que tenía oculta. Todavía no la he borrado desde hace... uf. Son cosas que quiero conservar pero aún no me he atrevido a manipularlas. A grabarlas y eliminarlas del disco duro. Ahí hay mails, sms, de todo. No mucho, pero sé que hay cosas que si se abren, dolerán.

He tenido curiosidad por un word que era "reacciones a la salida del armario". He leído cosas que pasaron en mi casa, muchas las recordaba, otras no. Pero eran mails que le mandaba a ella sobre el tema, no una reflexión propia. Mierda, entre ellos había uno suyo, justo respondiéndome al de después de decírselo a mis padres, cuando estaba hecha mierda. Bueno en fin. Que qué puta mierda. Demasiada dosis de ella en tan pocas horas. Como nos queríamos, joder....

Voy a la calle a ver si se me congelan las ideas. Y el corazón.